2º de Bachiller A

Tutor: Francisco Hermoso

Mi nombre es Francisco Javier Hermoso Madrona, profesor de las asignaturas de Sociales (Geografía e Historia), Historia del Mundo Contemporáneo, Historia de España, Historia del Arte y Geografía. Actualmente soy tutor de Segundo de Bachillerato Letras, nivel en el que vengo actuando como tal desde hace unos años, si bien a lo largo de mi trayectoria profesional he sido tutor de 3º de ESO y de 1º de Bachillerato. 

Se puede decir que llevo prácticamente toda mi vida relacionado con el colegio, pues entré en él, como alumno, a la edad de 9 años, y salvo el período de estudio en la universidad, he seguido ligado al centro con posterioridad como profesor, entrando a prestar mis servicios en el año 1988.  

Entre los objetivos que me planteo cada año, al recibir una nueva hornada de estudiantes en mi tutoría me gustaría destacar: 

El fomento de la autoestima, la resiliencia, la motivación, la actitud ante posibles frustraciones, el esfuerzo y la mejora diaria, la innovación a la hora de impartir clase, la cultura del emprendimiento y de liderazgo para hacer frente a los desafíos que un mundo tan complejo como el actual les va a presentar en un futuro inmediato. 

En mi modesta opinión, la clave reside en que todos los alumnos y alumnas nunca dejen de creer en ellos mismos, que comprueben que, con esfuerzo y dedicación, pueden alcanzar las metas que se propongan, por imposibles que aparezcan a lo largo del curso. Para ello, y haciendo uso de una frase del filósofo alemán Nietzche, el Colegio Europa, como centro, intenta que sus alumnos y alumnas “estén preparados para enfrentarse a todo”. 

Personalmente, creo en una acción tutorial donde la conexión entre el alumnado como grupo y yo mismo sea la auténtica clave de todo y, para ello, resulta fundamental la confianza mutua, confianza que se basará en lo que denomino “el poder de la palabra”, es decir, poner en práctica una cultura de la conversación que me permita conectar emocionalmente con los alumnos y alumnas a mi cargo. 

Para terminar, decir que si se hace camino al andar, procuraremos avanzar firmemente por un camino que nos lleve hacia la excelencia, tanto a los alumnos y alumnas como a mí mismo. 

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