Premiados por descubrir que la Coca Cola mata los espermatozoides

El investigador que descubrió que la Coca Cola destruye los espermatozoides y los científicos que descubrieron que la gente comerá feliz patatas fritas rancias si crujen fuerte han triunfado en los premios alternativos Ig Nobel, entregados por los editores de Annals of Improbable Research, una revista de humor científico.
Los premios están basados en investigaciones publicadas, algunas con intención humorística, aunque otras no. Los Ig Nobel honran la investigación real, pero buscan ser una alternativa divertida a los extremadamente serios premios Nobel que se entregarán la próxima semana en las categorías de Medicina, Química, Física, Economía, Literatura y Paz.
Investigaciones curiosas
Deborah Anderson, del Boston University Medical Center, y sus compañeros recibieron el premio de química por un estudio de 1985 publicado en el New England Journal of Medicine que descubrió que la Coca Cola mata los espermatozoides. En la categoría nutricional, Massimiliano Zampini de la Universidad de Trento, Italia, y a Charles Spence de la Universidad de Oxford en gran Bretaña obtuvieron el galardón por engañar a un grupo de personas haciéndoles creer que estaban comiendo patatas fritas frescas al reproducir un sonido crujiente cuando las mordían.
La comisión de los IG Nobel también entregó el premio en la categoría de biología, que fue para el equipo francés que descubrió que las pulgas de los perros pueden saltar más lejos que las pulgas de los gatos, mientras que el premio de medicina fue a un equipo de la universidad de Duke, en Carolina del Norte, que demostró que los placebos caros funcionan mejor que la falsa medicina barata.
Tampoco se quedó sin galardón un equipo de la Universidad de Sao Paulo, que ganó un premio especial de arqueología por demostrar como un armadillo puede arruinar una excavación arqueológica. Entre los ganadores de años anteriores figuran el inventor de los flamencos de plástico rosado, un investigador que filmó a pato ánade azul sodomizando a un macho muerto y un médico que curaba el hipo aplicando masajes anales digitales.
fuente: diario sur.
Me hace gracia cómo, con lo difícil que es entrar a una carrera, aprobarla y llegar a ser científico luego te puedes pasar años investigando si salta más la pulga de un perro o de un gato. Cosas del aburrimiento.
Pero, esto ya es opinión personal, ¿no sería más útil ese mismo tiempo de investigación en otros campos como en farmacia o medicina?
SaludoS

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