Nada, nada, yo tampoco quiero ser menos, así que me subo al tren de las preguntas sin respuesta. Pero para darle el pertinente tono literario, las que os pongo aquí tienen su origen en la literatura. Así que para cada pregunta pido dos respuestas: el personaje que la pronuncia y el autor del libro (evidentemente no tienen por qué coincidir). Ahí van:
- Si yo hubiese escrito esta mi limitado orgullo como escritor en potencia reventaría vanidosamente al pasar al siguiente nivel aristotélico. Por otro lado, resume como nada ni nadie la angustia vital, la duda existencial: “¡Ah de la vida!… ¿Nadie me responde?”
- Esta es más breve y el inicio de una guerra que aún no ha acabado: “Non serviam!“
- Esta va dedicada a esas mujeres que, si te miran, tienen el rostro en una típica pose: nariz altiva mirando al cielo, mirada soslayante por encima del hombro y ni el más mínimo atisbo de sonrisa en los labios, más bien, una mueca de desprecio. Dice así. “Sí, es un pavo real en todo, excepto en la belleza“
- Y por último, ¿qué pregunta la “hermosa joven” de la foto al apuesto mozo y qué le contesta éste? (Si alguien me dice los nombres le regalaré el lunes una maravillosa caja de agujeros de donuts ;))